GAD Parroquial Pedro J. Montero

Pedro J. Montero

La parroquia rural Gral. Pedro J. Montero está en la región costera, dentro del cantón San Jacinto de Yaguachi en la provincia del Guayas. Pertenece a la Zona de Planificación 5 y tiene una extensión de 7.53 hectáreas.

Está ubicada al sur del cantón Yaguachi en la provincia del Guayas, en una llanura que forma parte de la cuenca del río Guayas, cerca del kilómetro 26 de la vía Durán-Tambo, en el margen derecho del río Bulu Bulu.

Límites de la parroquia rural Gral. Pedro J. Montero;

Norte: Milagro, Roberto Astudillo y parroquia CONE.

Sur: Río Culebra de la parroquia Taura y el Cantón el Triunfo. 

Este: Cantón el Triunfo y Marcelino Maridueña (San Carlos). 

Oeste: Parroquia Virgen de Fátima.

Datos Históricos.

La parroquia rural Gral. Pedro J. Montero (Boliche), impregnada de una rica historia social y cultural, ha experimentado una notable evolución desde sus humildes comienzos como El Recinto Boliche.

Su ascenso a la categoría de parroquia bajo el nombre de San Andrés, por decreto del concejo cantonal de San Jacinto de Yaguachi el 10 de marzo de 1892, marcó un hito importante en su desarrollo, siendo este hecho oficializado el 11 de julio de 1892, fecha en la que entró en vigor la mencionada ordenanza. Posteriormente, el 15 de julio de 1939, se produjo un cambio significativo al renombrar la parroquia como Gral. Pedro J. Montero (Boliche).

A lo largo de su trayectoria, la economía de la parroquia ha estado predominantemente centrada en la agricultura, destacando los cultivos como la caña de azúcar, arroz, cacao, banano y cultivos de ciclo corto.

Estas actividades han sido pilares fundamentales para el desarrollo económico local, siendo la agricultura su principal motor impulsor. No obstante, se evidencian desafíos en la diversificación económica, ya que la parroquia muestra una limitada integración con otras industrias.

Aunque el comercio desempeña un papel importante, se observa una disminución en la relevancia de otras actividades económicas. La economía local se ha visto afectada, especialmente en términos de empleo, debido a factores como la pandemia, lo que subraya la necesidad de implementar estrategias que fomenten la diversificación y sostenibilidad económica, así como la creación de empleo en sectores no agrícolas para fortalecer la resiliencia económica de la comunidad. La actual vocación de la Parroquia rural Gral. Pedro J. Montero (Boliche) se fundamenta en la capacidad de adaptación a los cambios económicos contemporáneos y en la colaboración comunitaria para superar los desafíos.

Se presenta como un lugar donde el pasado y el presente convergen, generando una comunidad fuerte y comprometida con la preservación de su legado para las generaciones futuras.